Llega la fiesta de los Reyes Magos con un regalo para 9 ayuntamientos y sus concejos menores: cribado masivo de toda la población. Según pregona el bando o así lo entendemos nosotros, se conmina a infantes mozos y ancianos de los ayuntamientos concernidos (9) a presentarse en el pabellón de deportes de Cistierna de 9 a 14 horas. Era de esperar…, después del desparrame navideño de púberes y mozos, sin que nadie bajase la mano (la mano de aquellos que tienen la potestad para bajarla) en orden al control de tanta gallofa. Las gentes de cuarenta para arriba han cumplido rigurosamente con todos los interdictos y cánones de los distintos gobiernos: califal; taifa cabileña y concejil. Desde luego no faltarán políticos locales que para librarse de la grave responsabilidad que les concierne echen la culpa a las familias y cenas navideñas... Nos preguntamos, cómo será el órden o disposición de dicho cribado: edad: ancianos, jóvenes, niños; por orden alfabético; por orden y prelación concejil o nos juntarán a todos en rebaño (en eso nos han convertido después de un año a golpe de decreto y limado de libertades) esperando entrar en las horcas caudinas del contadero como hacían los pastores con los borregos a la hora de bajar a Extremadura. Si acuden en tropel todos los ayuntamientos, la cola promete llegar a Crémenes y el riesgo de contagio se multiplicará por nueve, número de los concejos que tienen que acudir a la inesperada romería. Se percibe en todo ello la improvisación, el aquí te pillo aquí te mato. ¿Es que esas postestades públicas que nos acaban de acogotar con la alcabala del IBI (otro robo legalizado como el latrocinio de sucesiones; nos gobiernan los hijos de Caco ¡la cona de su madre!), no veían lo que pasaba en nuestras calles de 18 a 23, aunque la hora del toque para reunir la vecera es a las 22? Esperemos que al menos aceras, sendas y carriles estén transitables. Después de la nevada, innumerables han sido los golpes, batacazos, costaladas y mamporros de días pasados en calles y callejas de la villa. Para ejemplo: la calle Riaño y su famosa escalera mataviejas, que parece ha entrado en una nueva glaciación. Que Dios nos coja confesados el próximo día de Reyes…
