Dos caminos a Santiago de Compostela convergen en la villa de Cistierna el Vadiniense y el Vexu Kamín o Viejo Camino. Para hablar de éste último vino el pasado sábado día 25 a la sede del Instituto Bíblico en La Montaña d. Julián González Prieto. Presentó un documentado trabajo de investigación que ya va por la segunda edición y, adelantaba que prepara la tercera. El autor peregrinó un día por el camino de los franceses a la tumba del apóstol y surgió en él una pregunta ¿Por dónde iban a Santiago los peregrinos antes de la existencia del camino francés? La respuesta fue la primera edición del Vexu Camín, un libro que escribió con rigor histórico y el pertinente trabajo de campo. Descubrió un camino que cuando dejaba atrás el país de los vascones discurría siempre hacia el Oeste por el piedemonte de la Cordillera Cantábrica (Norte de Burgos, Palencia, León) hasta adentrarse en Galicia. Un camino que recorrían miles de concheros durante más de trescientos años, antes del francés, cuando las frecuentes razias musulmanas en la Meseta Norte hacían imposible cualquier peregrinación. Aunque d. Julián es persona pacífica, bondadosa, de probada bonhomía, desde la primera edición su obra se ha visto inmersa en una polémica solo justificada por el enorme ego de aquellos que sin investigar ni publicar desean subir al festín de gloria depositado en el carro de heno, cargado con grandes sacrificios por Julián. Otros sin temor de Dios ni del autor, pues conocen que es un bendito, se han lanzado a señalizar el camino y denominarlo con prosaicos nombres. Aquellos que se ocupan de señalizar sin el consejo del que está autorizado, más que dirigir al peregrino a la tumba del apóstol, parece que pretenden llevar a la tumba: al peregrino al camino y al apóstol. En fin…, creemos que d. Julián ya está curado de espantos con tanto chasco, deslealtad, estropicios y desafueros que, paradójicamente le han hecho más fuerte y valeroso en orden a defender lo que le pertenece. El Viejo Camino a Santiago tiene un futuro esplendoroso, si se ciñe al estudio realizado por d. Julián, que entre otras cosas destaca su gran patrimonio: artístico, natural, paisajístico. Esta obra tiene además un valor añadido, algo que casi ningún tratadista hace cuando escriben sobre los caminos a Santiago, resalta el valor espiritual y penitencial, valores que tenía ya cuando lo inauguró el rey astur Alfonso II el Casto a principios del siglo IX.
Cartel de la presentación del Vexu Kamín o Viejo Camino, patrocinado por el Instituto Bíblico; Grupo Eulen; Caja Duero
Julián Prieto comienza su presentación (Foto: Siro Sanz)
Un numeroso público venido de León, La Ercina, Prado de la Guzpeña, San Pedro de Foncollada, La Serna, Sabero y Crémenes llenaron el salón de la Rectoral de Cistierna, sede del Instituto Bíblico (Foto: Siro Sanz)
Julian Prieto y el Flautista en el Camino Sr Recio que nos deleito con su hermosa música. (Foto: Siro Sanz)