EL AGUASALIO: FÓSIL DE LA TOPONIMIA Y BELLEZA NATURAL DE CISTIERNA
Eutimio Martino-Siro Sanz
El Valle del Aguasalio se perfila al Este de la villa de Cistierna, entre el Murrial y Peñacorada. Da comienzo abruptamente en Campo el Valle y termina bruscamente cortado al Norte por un escarpe rocoso que le une a Peñacorada, un poco más abajo de las ruinas del castillo donde da comienzo el pinar.
Paralelo al camino que asciende hacia el castillo, corre un reguero que sólo llena en épocas de deshielo y durante las lluviosas primaveras. La riega se origina en la ladera Oeste del primer pico de Peñacorada, pico frontero que da cara a la villa. Baja despeñándose, sonoro entre el pinar, para caer al Aguasalio en hermosa cascada temporera junto a la Cueva la Nevera. Arroyo y valle reciben el mismo nombre: Aguasalio.
El nombre es un híbrido latino y prerromano: Aqua-Salia.
Mela llama flumen, "río" en latín al Salia, refiriéndose al Sella en la costa (3,1,18). Hacia el año 1005 figura en Sajambre como rivulo Selia (Martino). En 1052, a la vez que flumen, se le llama genéricamente aqua de Selia (Larragueta). El hablante latino utiliza el nombre aqua que da agua en castellano, para denominar un Salia o Selia que no comprende, pero que intuye que viene a significar río.
El nombre Aguasalio no es extraño en la Montaña Oriental Leonesa. Contamos con éste de Cistierna; el Aguasalio de Fuentes de Peñacorada; un Aguasalio en Aleje, lateral a Pico Moro por el Oeste; ya en la vertiente Oeste del Moro, existe el Pico Aguasalio de Argovejo; los Aguasalios de Vegacerneja; en el Libro de la Montería (siglo XIV) "el Aguasalio de los montes de Acebedo"; Altos de Aguasalio en Portilla de la Reina. En Cistierna, como en otros lugares donde aparece Aguasalio, figura como nombre de lugar, visto lo que significa tanto Salia como aqua, sólo puede justificarse por la presencia de agua que pasa a denominar la cuenca entera o el valle donde se origina esa agua.
No deja de asombrarnos la belleza del Aguasalio de Cistierna, tan agreste, salvaje y pura. Un lugar poco frecuentado pese a su cercanía al núcleo urbano de la villa. Desde aquí animo a mis atribulados paisanos para que visiten éste extraordinario paraje, el silencio y la naturaleza invitan a la introspección y contemplación sanadora. En la lluviosa primavera del año del señor de 2013, el arroyo Aguasalio se derrama con grandioso aparato de aguas golpeadas y espumosas para salvar el salto de la Cueva de la Nevera.
El Valle del Aguasalio desde la ladera del Murrial. (Foto Siro Sanz)
Vista del Aguasalio aguas abajo. Al fondo la vega del Esla. (Foto Siro Sanz)
Cascada que llena durante los temporales de invierno o lluviosas primaveras. (Foto Siro Sanz)
La cascada salva un fuerte desnivel precipitándose al valle sobre las blancas calizas de Peñacorada.
(Foto Siro Sanz)
(Foto Siro Sanz)